Los premios ESPY 2015, recibieron un año más a lo mejor del deporte mundial y en esta ocasión contaron con una protagonista especial: Caitlyn Jenner, que fue galardonada con el premio Arthur Ashe al coraje, tras su cambio de género. Antes de darse a conocer como mujer transgénero este año, era conocida como Bruce Jenner, el campeón del decatlón de los JJ.OO de 1976.

«Cuando tú te gustas, nada puede contigo»

El premio es otorgado a atletas cuyas contribuciones han trascendido en el mundo del deporte.

Este es el discurso que pronunció una emocionada Caitlyn, y que queremos que sea inspirador para ti: cuando tú te gustas, nada puede contigo:

 

“Muchas gracias; es maravilloso estar aquí esta noche. Los últimos meses han sido un torbellino de experiencias diferentes y tantas emociones. Pero a decir verdad, parece que cada vez que le doy un giro a mi vida, me pongo en estas situaciones de gran presión: competir en los JJOO, formar a una familia… pero nunca he sentido más presión mi vida que en los últimos meses. Elegir esta ropa: chicas, ¡os entiendo! El pelo, los zapatos, el maquillaje… ¡estoy exhausta! Y luego la policía de la moda… por favor, tengan piedad.

Y quiero darle un saludo a nuestro equipo de fútbol de EEUU. Chicas, estáis muy guapas.

Pero la verdad, es que hace unos meses no había conocido nunca a nadie más que fuera transgénero, que fuera como yo. Nunca había conocido a una persona transgénero, nunca. Y después de lidiar con mi situación, sola en privado, y he vuelto de este viaje con un conocimiento increíble.

He abierto los ojos, ha sido algo inspirador, también algo atemorizante. En toda esta nación, en todo el mundo en este momento, hay gente joven que está lidiando con ser trans; están aprendiendo que son diferentes, y están tratando de entender cómo manejarlo, a pesar de todos los problemas que tiene un adolescente.

Están siendo golpeados, hasta les están asesinando y se están suicidando. Los números que acabamos de escuchar antes son increíbles, asombrosos, pero son la realidad de lo que es ser transgénero a día de hoy. Sólo el mes pasado, el cuerpo de Mercedes Williamson, de 17 años, una joven de 17 años de color fue hallada en Campo de Mississippi apuñalada de muerte. También os quiero hablar de Sam Taub de 15 años, un joven transgénero de 15 años de Bloomfield, Michigan. En abril, Sam se quitó la vida. La historia de Sam llegó solo unos días antes de que ABC transmitiera mi entrevista con Diane Sawyer. Cada vez que algo así sucede, la gente se pregunta “¿pudo haber sido diferente?” Si el haberle prestado atención a este tema, hubiese cambiado la forma en que suceden las cosas, nunca lo sabremos.

Si hay algo que yo sí sé sobre mi vida, es el poder de la atención. Y a veces puede ser abrumador, y con esto viene la responsabilidad como grupo, como atletas, cómo llevamos y conducimos nuestras vidas; lo que decimos, lo que hacemos, es absorbido y observado por millones de personas, en especial los jóvenes. Yo sé que soy clara con la responsabilidad de contar mi historia de forma correcta -para mí, seguir aprendiendo y hacer todo lo que pueda para ofrecer una nueva forma a cómo la gente trasn es tratada. Y todo para promover una idea muy simple: la aceptación de la gente por quién son, aceptar las diferencias de la gente.

Yo os pido hoy que unáis a mí para que ésta, sea una de sus causas. ¿Cómo comenzamos? Comenzamos con la educación. Yo tuve la suerte de conocer y tratar con Arthur Ashe, varias veces. Sé lo importante que era la educación para él; aprendamos tanto como podamos sobre otra persona, entendámosles mejor.

Yo sé que la gente que se encuentra en esta sala, respeta el arduo trabajo, el entrenamiento, la superación de situaciones difíciles, para lograr el resultado que deseamos. Yo entrené duro, competí fuertemente y por eso la gente me respetaba.

Pero esta transición ha sido más difícil que cualquier cosa que pude haber imaginado, y ese es el caso de muchos, no sólo el mío. Y por esa razón, la gente trans merece algo vital: merecen nuestro respeto. Y de ese respeto viene una comunidad más compasiva, una sociedad con más empatía y un mejor mundo para todos los humanos.

Ha habido muchos que han recorrido este camino antes que yo. Desde el deporte, Renée Richards a Chaz Bono, a Laverne Cox, y muchos otros. Janet Mock está aquí esta noche, y quiero darle las gracias a ellos públicamente, a Arthur Ashe y su familia por darme este escenario para iniciar la siguiente fase de mi camino. Quiero saludar a todos los jóvenes atletas trans que están ahora recibiendo la oportunidad de practicar el deporte públicamente. Y al aparecer, a partir de esta semana, la gente trans podrá servir en las fuerzas armadas. Es una gran idea, pero todavía falta mucho trabajo por hacer.

 Quiero agradecer personalmente a mi amiga Diane Sawyer: sólo puedes contar tu historia por primera vez, una vez. Diane lo hiciste de forma auténtica, con mucha dignidad. La comunidad y yo estamos agradecidos por eso: gracias, Diane, de corazón. Estoy orgullosa de llamarte mi amiga.

Aquí viene lo difícil: agradezco a mi familia… el miedo más grande de salir y contar mi historia, es que no quería herir a nadie, y más que nada, a mi familia, a mis hijos. Quería que mis hijos estuvieran muy orgullosos de su padre, de lo que ha logrado en su vida. Me habéis dado tanto, tanto apoyo… estoy tan agradecida de teneros en mi vida…

Y por último, mi madre… mi madre hace poco más de una semana tuvo una operación y no sabíamos si iba a poder sobrevivir, pero está conmigo esta noche para compartir esta velada. Siempre pensé que saqué mi valentía y mi determinación de mi padre, que aterrizó en Omaha Beach y sobrevivió a la Segunda Guerra Mundial, pero yo creo, mami, que saqué esas cualidades de ti… yo te amo: estoy tan contenta de que estés aquí para compartir esto conmigo…

Es un honor que asocien la palabra valentía con mi vida, pero en esta noche, se me ocurre otra palabra: afortunada. Le debo mucho al deporte: me ha mostrado el mundo, me ha dado la identidad. Si alguien quería golpearme, ¿sabéis qué?, era el jugador más valioso del equipo de fútbol americano, así que, no era un problema. Lo mismo pasa esta noche: si queréis burlaros de mí, adelante, la realidad es que no me molesta, pero para los miles de jóvenes que quieren ser auténticos con su identidad, no deben tener que enfrentarse a ese tipo de cosas. Para la gente que se pregunta de qué se va todo esto, ya sea sobre valentía, controversia o publicidad, yo les diré: se trata de qué sucede de aquí en adelante. No es sólo sobre una persona, es sobre miles de personas. No es sobre mí, es sobre todos nosotros; aceptar y aceptarnos los unos a los otros. Somos todos diferentes y no es malo: sino algo bueno. Si bien no es fácil superar las cosas que no siempre entendemos, yo quiero demostrar que es posible, totalmente posible, si lo hacemos juntos.

Muchas gracias por este escenario, gracias por este honor que me han dado a mí, y a mi familia.

Gracias.»